Le Figaro 6/12/2008
(traducido por Hasardée)
Para hacer frente a la crisis económica mundial, los presidentes de los países de América Central y el gobierno de la República Dominicana han convenido este viernes, adoptar una moneda única. No se precisó todavía ni el nombre de la futura moneda ni la fecha en la que entrará en circulación.
Este acuerdo para una moneda única constituye uno de los elementos de un « Plan de medidas urgentes » para « amortiguar el impacto regional de la crisis financiera internacional”, enunciadas en una declaración de 41 puntos firmada en San Pedro Sula, la segunda ciudad de Honduras, que acogió la cumbre No. 33. Este Plan prevé particularmente “la creación de un fondo común de crédito, económico y financiero, para el desarrollo de la región en el contexto de las negociaciones América central-Unión europea”.
Si la economía constituyó el plato fuerte de esta cumbre, se abordaron también otros asuntos. Los participantes manifestaron su deseo por la creación de un “pasaporte centroamericano” y se pronunciaron por “la promulgación de leyes sobre la inmigración, la educación y la seguridad democrática, entre otros asuntos, además de dar una mayor cohesión a la integración centroamericana y de asegurar a los ciudadanos los beneficios de esta integración”.
Se giraron instrucciones al secretariado general del Sistema de integración de América central para presentar en la reunión número 34 de los presidentes, un reporte sobre el avance de estos temas. La cumbre reunió alrededor del presidente de Honduras, Manuel Zelaya, a sus homólogos Alvaro Colom (Guatemala), Elías Antonio Saca (El Salvador) y Daniel Ortega (Nicaragua), así también a Samuel Lewis Navarro, vice-presidente y ministro de asuntos extranjeros de Panama, Rafael Albuquerque, vice-presidente de la República Dominicana, Marco Vinicio Ruiz, ministro del Comercio exterior de Costa Rica y Gaspar Vega, vice-primer ministro de Belice.
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